Thomas Jefferson, uno de los lideres históricos de Estados Unidos dijo lo siguiente “La honestidad es el primer capítulo en el libro de la sabiduría.”. Personalmente creo que la honestidad esta íntimamente a la sinceridad y por lo tanto ser honesto es ser trasparente. El Apóstol Pablo, hablando sobre algunas evidencias de una vida transformada y de mente renovada, dijo lo siguiente: “Que el amor de ustedes sea sin fingimiento, aborreciendo lo malo y siguiendo lo bueno” (Romanos 12.9). Lo anterior nos enseña tres cosas:
- Que la honestidad es una evidencia de una vida trasformada por Dios.
- Que la honestidad debería de ser reciproca
- Que la honestidad no favorece lo malo, sino lo bueno.
Lo anterior se vuelve relevante en una situación como la que atravesamos hoy, en donde la honestidad con nuestra familia, con nuestras responsabilidades civiles y en nuestras responsabilidades laborales, debería de ser una muestra de la sabiduría que Dios nos ha dado. Por lo cual te animo a que hagas un compromiso junto a tu familia delante de Dios de vivir en honestidad. yo también me comprometo a ser honesto.