En el Evangelio no hay favoritismo

“Hermanos míos, no tengan su fe en nuestro glorioso Señor Jesucristo con una actitud de favoritismo. Porque si en su congregación entra un hombre con anillo de oro y vestido de ropa lujosa, y también entra un pobre con ropa sucia, y dan atención especial al que lleva la ropa lujosa, y dicen: «Siéntese aquí, en un buen lugar»; y al pobre dicen: «Tú estate allí de pie, o siéntate junto a mi estrado»; ¿acaso no han hecho distinciones entre ustedes mismos, y han venido a ser jueces con malos pensamientos?”

Santiago 2:1-4 NBLA

El cristianismo y el clasismo social no son compatibles. Vivimos en días sensibles con relación a las diferencias entre pobres y ricos, es cierto que hay discriminaciones e injusticias, esa es la marca de un mundo que ha sido vendido al pecado, pero en el Señor estas cosas no tienen ningún sentido.

En Palabras de Santiago, los favoritismos a ciertas personas no deberían mencionarse entre personas cristianas.  Algunos hermanos en las sinagogas habían separado unas sillas privilegiadas para los más ricos, mientras los pobres era dejados en los peores lugares. En lugares donde no había pantalla que proyectaban lo que sucedía o un parlante amplificado, eso era negarles a unos escuchar la lectura de la biblia y la enseñanza mientras se reservaba ese privilegio para otros.

Nada más aborrecible. Las iglesias no son lugares para este tipo de cosas. He oído de lugares donde se habla de iglesias para ricos e iglesias para pobres, un rico no asiste a una iglesia de un pobre y viceversa; esto es de condenar en realidad.

Cuando Cristo murió en la cruz, no murió por gente pudiente, lo hizo por todos aquellos que vino a salvar. En su ministerio incluso, el Señor Nunca hizo acepción de personas, entonces ¿quiénes nos creemos nosotros para pensar qué hay personas con mayores privilegios que otras?

Que Dios nos ayude a entender que su evangelio es una oferta de perdona para todo el que cree, no para el que puede pagarlo solamente.

Jacobis Aldana (138)

Pastor y plantador de iglesias en Santa Marta, Colombia, es Licenciado en Artes y Estudios Teológicos del Miami International Seminary (MINTS). Sirve como Director Editorial de Soldados de Jesucristo y como director de la fundación de Estudios Bíblicos Alfa y Omega. Jacobis además es miembro fundador de la Red de iglesias Bíblicas del Caribe Colombiano. Está casado con Keila y es padre De Santiago y Jacobo.