Leer Lucas 21:10-19
¿Qué hubiese pasado si los empresarios del mundo hubiesen sabido de la eminente caída de la economía en todo el mundo? ¿Piensas que hubieran tomado medidas a fin de amortiguar o no sufrir pérdidas?
Me imagino que si.
Este fue el interés de los discípulos de Cristo cuando escucharon a Jesús hablar de lo que acontecería con el templo y la ciudad de Jerusalén.
Este interés los llevo a preguntarle a Jesús ¿Cuándo serian estas cosas y que señal habría de su venida?
Jesús entonces responde su pregunta contándoles sobre las señales que se verían antes del fin. Pero no las señales que ocurrirían inmediatamente antes del fin, sino las señales que ocurrirían después de la destrucción del templo hasta el fin del mundo.
Y lo que determina la duración de ese tiempo según lo dijo el mismo Jesús es hasta que “…los tiempos de los gentiles se cumplan” lo cual, es una referencia al tiempo en que, por la predicación del evangelio en las naciones no judías, las personas no judías abracen el cristianismo. Es decir, que el fin no vendrá hasta que la última persona no judía escogida por Dios sea salvada, entonces después de eso vendrá el fin.
Pero mientras esperamos el fin, estas son las cosas que sucederán:
En primer lugar, habría problemas políticos entre las naciones del mundo, los cuales, les harían declararse la guerra entre ellos, pues se levantaría nación contra nación y reino contra reino.
Y díganme si esto no es lo que ha acontecido desde entonces pues las guerras entre naciones no han parado, y aunque aparentemente hemos vivido en una era libres de grandes guerras en cualquier momento se puede estallar una como el mundo no lo ha visto jamás debido a el avance en armas químicas y nucleares con que las potencias cuentan.
En segundo lugar, les dijo que antes del fin habría desordenes ambientales que conducirían a la tierra a sufrir de graves terremotos, plagas que provocarían enfermedades fatales, hambruna en la mayoría de las naciones de la tierra, y además de esto grandes señales en los cielos que traería terror a los hombres y mujeres del mundo.
Y dígame si no es esto lo que estamos viendo ocurrir ahora mismo en el mundo, nunca antes se había visto lo que ha producido el COVID-19 en toda la tierra, hace unos días se reportó que en Kenia se ha desatado una gran plaga de langostas que representa un daño muy grave en las cosechas de todo el país, hace unas semanas hubo un terremoto en Perú, y tantos otros en diversos países, además de esto 15 volcanes entraron en actividad a la misma vez, y muchas otras cosas más que confirman que estamos en los postreros días.
¡Wao! La verdad que escuchar todo eso me pone los pelos de punta.
Sin embargo, antes de que estas cosas acontezcan, es necesario que ocurra otro tipo de actividad.
¿Qué actividad es la que debe darse antes de las mencionadas?
La persecución de los que profesan la fe cristiana. En el pasaje Jesús enseña que los creyentes serian perseguidos, entregados a los líderes religiosos que se oponen al cristianismo, encerrados en cárceles, y llevados ante los gobernantes del mundo para ser sentenciados a muerte.
¿Y porque ocurrirá esto? Porque según Jesús en los tiempos antes del fin los cristianos seremos odiados de todos los hombres, y esto debido a los principios de vida cristiana que se contrapone al estilo de vida de las personas de este mundo.
Y esto de ser odiados por todos no está muy lejos de nuestra realidad hoy, donde cada vez más los cristianos somos considerados como intolerantes, homofóbicos, y crueles porque defendemos los principios de vida que nos enseña la Palabra de Dios.
Por ejemplo, actualmente el diariocristianoweb.com ha informado que China organizó y movilizó a casi unos mil policías chinos en una operación contra la iglesia evangélica donde encarcelaron a unos mil cristianos.
Sin embargo, esto recién comienza porque el odio por los cristianos será tan tenaz que serán nuestros propios familiares que nos entregarán a las autoridades anti-Dios que se levantarán en este mundo. El texto dice que seremos entregados aun por padres, hermanos, parientes y amigos, y que tristemente algunos de los cristianos serán asesinados.
¿Te asusta todo esto?
Pues para que estemos tranquilos nuestro Señor Jesucristo nos dijo que a pesar de toda esta hostilidad nosotros salvaríamos nuestras almas por medio de la perseverancia en la fe cristiana. Pues para la gran mayoría de nosotros ni un solo pelo de nuestras cabezas perecerá.
Es más Jesús nos dice que ni siquiera nos preocupemos con preparar nuestra defensa cuando seamos llevamos ante los tribunales humanos, pues en esos precisos momentos el mismo Señor nos dará tanto la sabiduría como las palabras para hablar a y refutar toda acusación en nuestra contra y en contra del cristianismo.
Según Jesús cuando seamos llevados ante los juzgados por causa de nuestra fe, las mismas solo serán oportunidades orquestadas por Dios para que podamos testificar del santo evangelio de Jesucristo.
Se que esto pudiera llenarnos de temor, sin embargo, si lo pensamos no debemos temer temor, pues este es el propósito de nuestros verdaderos enemigos, que nosotros tengamos miedo a lo que este mundo puede hacernos.
Pero escuche las palabras de Jesús en el evangelio según San Mateo 10:28, “Y no temáis a los que matan el cuerpo, pero no pueden matar el alma; más bien temed a aquel que puede hacer perecer tanto el alma como el cuerpo en el infierno.”
Hermanos no tenemos por qué tenerle miedo a nadie, es más al único que debemos tenerle miedo es a Dios, y él tememos.
Recuerda que el perfecto amor echa fuera el temor.
Así que amado hermano ¿Estas animado a enfrentar los últimos tiempos con una actitud de vencedores?
Pues esta es la actitud que debe caracterizarnos, pues en Cristo ¡Somos más que vencedores!
¡Bendiciones miles!
