Que tu fe sea evidente por tus obras

“¿De qué sirve, hermanos míos, si alguien dice que tiene fe, pero no tiene obras? ¿Acaso puede esa fe salvarlo?”

Santiago 2:14 NBLA

Me encanta el lenguaje de Santiago, directo y al punto.
La fe es una convicción, algo que creemos acerca de Dios, su plan y la manera en que eso se revela en nosotros.
Una persona puede tener esa convicción profundamente arraigada en su mente, sin embargo, no tener ni la más mínima evidencia de que realmente ha sido alcanzado por Dios.

Es a esto a lo que llamamos una religión vacía, la que es solo de labios hacia afuera. Las obras, la misericordia, el amor al prójimo son el reflejo de lo qué hay en nuestra mente y corazón acerca de Dios.

Pero debemos tener cuidado, esta es una verdad que debe entenderse a la luz de la revelación completa de la biblia. Es cierto que la fe sin obras no sirve de nada, pero las obras por si sola no dicen necesariamente algo acerca de la fe de una persona. Alguien puede tener un gran espíritu altruista, salvar a los animales en extinción, cuidar las ballenas en Asia y plantar árboles para mitigar la deforestación, esas obras tienen cierta reputación, pero tampoco tienen utilidad delante de Dios si no son el resultado de una verdadera fe.

Así que, la fe y las obras deben ir de la mano, no puede haber una cosa sin la otra. Una fe sin obras es hipocresía y obras sin fe es moralismo, mera buena forma de comportarse y ya.

Nuestro llamado es a hacer evidente nuestras convicciones con obras que reflejen que realmente Dios ha obrado en nuestros corazones.

El Señor nos ayude.