Sí, ¡Él volverá!

Pero del día y la hora nadie sabe, ni aun los ángeles de los cielos, sino sólo mi Padre.

Mt 24:36

Una de las verdades escenciales de la fe cristiana es esta: el Señor volverá por segunda vez.

A lo largo de la historia han surgido personas que sugieren haber encontrado los números exactos al respecto del regreso del Señor y no solo desde las entrañas de los que estudian la biblia sino incluso de declarados incrédulos.

Cada momento crítico de la historia. Las guerras, los terremotos o las pestes parecen ser el caldo de cultivo PRA que muchos especuladores hagan su fiesta, lo triste en realidad es qué hay quienes siguen su juego.

Este pasaje es categórico en cuanto a dos cosas:

La primera es que es seguro que Jesus regresará por segunda vez. Esa es el ancla y la esperanza de la fe cristiana.

La segunda verdad es que nadie sabe ni el día ni la hora si no solo el Padre en toda su potestad. Dios es el único.

Es cierto que días como los que vivimos hoy, afectados por una pandemia casi sin precedentes en nuestra generación pueden generar pánico y miedo sobre todo entre los que son profesantes pasivos de la fe, pero no debe ser eso lo que nos mueva a correr a Cristo. No seguimos a Jesús por algún miedo al futuro sombrío, le seguimos porque le amamos.

Es posible que el Señor aparezca en nuestros días, tal vez semanas, pero también es posible que no. Él no vendría sin que antes se cumplan las señales que él mismo anunció, pero lo que si es seguro es que regresará y eso debe llenar de descanso nuestras almas.

El día es desconocido, pero aquellos que estarán con él son conocidos por él, son sus ovejas, ellas oyen su voz y le siguen.

El Señor volverá por segunda vez y te aseguro que querrás estar con él. Ponte a cuentas, confía en él, confiesa tus pecados y espera junto a muchos otros al Señor que vendrá por su pueblo.